Los efectos de los vapeadores en la salud bucodental exigen la toma de medidas preventivas y que nos pongamos en manos de profesionales para detectar la presencia de alteraciones de enorme gravedad, como las que ahora vamos a comentar.
¿Qué tipo de consecuencias tienen los vapeadores en la salud bucodental?
En ocasiones, se considera que un cigarrillo electrónico es menos dañino que uno convencional. Lamentablemente, muchas veces ignoramos consecuencias y síntomas como:
- Una mayor irritación de las encías que puede terminar en gingivitis.
- La alteración de los tejidos bucales debido a su exposición continuada a compuestos químicos tóxicos y perjudiciales.
- El agravamiento del bruxismo y de la afectación a los huesos de la mandíbula.
¿Por qué vapear aumenta el riesgo de padecer cáncer oral?
El riesgo que conlleva esta actividad se debe a que los líquidos que se utilizan son químicos y, si aspiramos el vapor generado en el vapeador, podemos alterar el ADN de las células de la boca . Progresivamente, estas pueden convertirse en cancerígenas y provocar una alteración severa de nuestro estado de salud.
Es decir, el cáncer en la cavidad bucal no lo provoca la nicotina, sino los químicos vaporizados. Por ello, es imprescindible tener muy en cuenta que el alto nivel de tóxicos de un cigarrillo convencional es similar al de los líquidos de sabores empleados en uno electrónico. En este caso, las sales de nicotina, que pueden utilizarse o no, no afectarían a la salud bucal, sino a la cardiovascular y a la pulmonar, lo que aumentaría la nocividad del dispositivo de vapeo que utilicemos.
¿Qué podemos hacer si vapeamos habitualmente?
Lo más recomendable es comentarle a nuestro médico de cabecera que hemos decidido vapear para superar la adicción al tabaco. Posteriormente, hemos de ponernos en manos de un dentista para que revise los posibles daños que podríamos tener. En función de su valoración, así serán los pasos a seguir. Tengamos en cuenta las siguientes recomendaciones para preservar la salud bucal.
Una correcta higiene
Hemos de cepillarnos los dientes, emplear hilo dental y terminar con colutorio cada vez que comamos. Debemos tomarnos nuestro tiempo, emplear una pasta de calidad y repasar que la limpieza sea la más adecuada. Cambiaremos el cepillo cada dos meses y no deberemos olvidar del uso de uno interdental para eliminar cualquier resto de comida.
Llevar una vida saludable
Evitemos el consumo de alcohol, de refrescos y de azúcar refinado en la medida de lo posible. No es aconsejable dejar la adicción al tabaco para que se convierta en una al vapeo. Cuanto mejor controlemos nuestra necesidad de vapear, mejor para nuestra boca.
Acudir a revisiones periódicas
El dentista será quien marque la periodicidad de las visitas para ir comprobando cuál es el estado de nuestra boca y de la dentadura. Recordemos que la prevención es la mejor alternativa para detectar cualquier anomalía lo antes posible.
No hemos de olvidar que los efectos de los vapeadores en la salud bucodental pueden terminar por alterar seriamente nuestra calidad de vida. Tu dentista será quien se encargue de ayudarte para tomar las medidas preventivas más adecuadas en cada caso. ¡Cuida tu higiene dental y adopta hábitos saludables!
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