El intrusismo en el sector de la odontología puede ser peligroso para los pacientes. Por eso, cuando acudimos al dentista es necesario asegurarnos de que el profesional tiene licencia para llevar a cabo tratamientos odontológicos. Veamos el caso sucedido en 2017, cuando Cádiz condena a una protésico dental por intrusismo laboral.
El Juzgado de Jerez de la Frontera condena en primera instancia a una protésico dental sin licencia
Según las pruebas, la acusada tomó medidas en boca, obtuvo la impresión, elaboró la prótesis dental y la colocó directamente en la boca de un paciente; en su propio domicilio. Contaba con la licencia de protésico dental, por lo que el Juez recuerda que las anteriores acciones son «competencia exclusiva de un odontólogo u estomatólogo».
Qué dice la ley
La sentencia se basa en la Ley 10/1986, sobre Odontólogos y otros profesionales relacionados con la Salud Bucodental, en el Real Decreto 1594/1994 y la Ley 4472.002. Así, el juez constató «El protésico ha de trabajar sobre las impresiones que le proporciona el odontólogo o estomatólogo. No puede obtener estas impresiones ni, una vez positivadas, proceder a la colocación de ellas en la cavidad bucal. Ni está capacitado ni está habilitado ni en el local en el que trabaja la acusada se guardan y cumplen los requisitos sanitarios exigibles».
Penalización
Finalmente, la protésico dental fue condenada a pagar una multa de 8 euros diarios durante 6 meses, además del pago de las costas procesales.
Con estas medidas se pretende salvaguardar nuestra seguridad y salud bucal. Por eso, el Consejo General de Dentistas aconseja a la población que siempre acuda a un dentista colegiado para tratar cualquier problema en la cavidad oral. En caso de duda, se puede consultar al Colegio de Dentistas de la provincia en cuestión para saber si el profesional que le atiende está colegiado.
Sin comentarios