Es el acto de apretar repetidamente los dientes de manera inconsciente y sin ningún objetivo.
Puede suceder tanto de día como de noche y se conoce también como el “rechinar de dientes”
Es muy importante tratar este trastorno, ya que puede conllevar otros problemas de salud a largo plazo. Por ejemplo, dolor de cabeza, dolor de oído, afectación en la articulación temporomandibular, sensibilidad dental o desgaste de los dientes.
¿Qué tipos de bruxismo existen?
Hay diferentes tipos según los siguientes criterios:
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Según el tipo de presión: céntrico (cuando apretamos los dientes, de manera que afecta sobre todo a los premolares) o excéntrico (cuando frotamos los dientes, dañamos los bordes dentales y, en especial, los incisivos).
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Según su inicio: bruxismo del sueño (durante la noche) o de vigilia (durante el día).
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Según la gravedad: grado 1 o hábito incipiente (ocasional y controlable), grado 2 o hábito establecido (inconsciente, dañino pero todavía controlable), grado 3 o hábito poderoso (constante y perjudicial).
¿Cuáles son las causas principales?
Hoy en día todavía se desconoce la causa principal de esta dolencia. No obstante, hay varios factores nerviosos que influyen en su aparición, como la ansiedad y el estrés.
En cambio, cuando nos referimos a niños con este problema, suele estar relacionado con el proceso de dentición o el desarrollo de los músculos y huesos faciales.
¿Cómo podemos tratar esta dolencia?
Además de algunas recomendaciones para mejorar nuestro estilo de vida, podemos tratar esta dolencia mediante la colocación de una férula dental para el bruxismo.
Este protector dental se realiza a medida con el fin de reducir la tensión mandibular y evitar dolores y desgaste dental.
Nuestro dentista nos ayudará a poner fin a este problema que afecta a un 20% de la población mundial.
Visita nuestra clínica y te ayudaremos con tu problema de rechinar los dientes.
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